SINOPSIS:
Una ciudad en vilo. Un macabro asesino. Un tablero de juego. Marco Duarte y su equipo se enfrentan al mayor desafío de sus carreras. Una serie de crímenes rituales hacen cundir el pánico en las calles, una lucha contrarreloj por detenerlos desencadena una espiral de miedo, mentiras y sangre. Marco y sus compañeros luchan codo con codo para detener a un asesino invisible que ha convertido la ciudad en su particular tablero de juego. Una partida a vida o muerte que cambia la vida de sus protagonistas para siempre.
OPINIÓN:
¡Hola, lectores! Hoy traigo la reseña de tablero mortal. Marco Duarte 1
Un abogado es brutalmente asesinado en su despacho y puesto en escena de manera especial, el equipo de Marco Duarte se hace cargo del caso sin saber por donde empezar. Horas después otro cadáver aparece escenificado en un banco, esta vez se trata de una joven estudiante y lo que se repite en ambas escenas, además de las características del crimen es la aparición de pequeñas figuras pertenecientes a un juego de rol basado en las historias de H.P. Lovecraft. Lo que convierte la investigación en una carrera a contrarreloj para descubrir quién está detrás de esos macabros asesinatos, ya que según las pistas dejadas podría haber más víctimas.
Hoy vengo con mi primera lectura del año y no podría haber empezado de mejor manera porque me encantó. Había visto este libro en varias oportunidades en Instagram y siempre con opiniones excelentes. Y ahora entiendo por qué era tan recomendado y porque hay lectores que hacen tanto hincapié en darle la oportunidad a autores autopublicados porque por ahí se encuentran historias increíbles como esta. Lo primero que me sorprendió y que destaco es que estamos ante un libro muy corto, en pocas páginas el autor logra crear un thriller que lo tiene todo y es adictivo. Me parece que tiene mucho mérito siendo su primera obra, porque es muy difícil crear una historia de estas características, que sea de corta extensión, que esté muy bien escrita y que uno no sienta que le falte algo. La trama me gustó muchísimo, me pareció que está bien planteada y desarrollada, es potente y desde mi punto de vista hay originalidad en algunos elementos. La historia nos presenta unos asesinatos terribles, que al principio se presumen rituales porque están escenificados de manera impactante, pero que en realidad forman parte de un juego que se inspira de la literatura de H.P. Lovecraft. Lo que hace que Mateo y todo su equipo emprendan una investigación policial que supone todo un desafío porque en primera instancia no saben como abordar el caso y porque el asesino no se espera mucho para volver a actuar. Me pareció muy interesante todo el tema del juego y como se plantea, realmente es muy entretenido y esa relación con la literatura, a pesar de que no he leído al autor al que hace referencia, no es difícil entender lo que aborda. El mundo al que nos adentra atrapa y es genial para un libro de este estilo. La historia se compone de capítulos de muy corta extensión, está narrada en tercera persona desde la perspectiva de varios personajes y de una manera muy amena, ya que el autor apela a un lenguaje muy sencillo y directo. Algo que valoro del libro sin dudas es que el autor va al grano en todo momento, no se anda con rodeos o ahonda en descripciones sin sentido, de hecho utiliza las palabras justas, pero es fácil llegar a la imagen de lo que se está planteando. Y acá viene mi advertencia por si son sensibles que los crímenes son bastante macabros, y las escenas se representan con crudeza, aunque sin resultar algo morboso de más, porque el autor no tiene intención de instalarnos insistentemente esas imágenes grotescas. Simplemente, forman parte de los actos sádicos del asesino, y el autor trata eso de la mejor manera posible. Otro gran punto a favor de este libro y que lo vuelve tan adictivo es el ritmo, es muy vertiginoso, así se presenta desde el principio y se mantiene hasta el final. Hay una buena dosis de acción y tensión, que no te deja indiferente.
En lo que respecta a los personajes, acá tampoco se detiene demasiado en dar descripciones de ellos sin sentido, les dedica una rápida presentación y luego los vamos a ir viendo mientras se desarrolla la historia, ejercen sus tareas y se relacionan con sus pares. Nos da una pincelada de quienes son, su desarrollo como profesionales y el tipo de vida que llevan. No se detiene a describirlos con mucha profundidad, de esa que la mayoría de las veces parece necesaria, pero que al final termina tirando datos que en realidad son superficiales y a mí como lectora me dan igual. Y detesto que me corten la acción. Por eso disfruté mucho de este libro, a pesar de lo poco que el autor dedica a crearnos la “ficha” de cada uno, al final por lo menos en mi caso no me quedé con la sensación de que no los conocí. Porque esa pincelada basta, además, no quita que el autor indague en sus conexiones y retrate relaciones que van más allá del trabajo. La verdad es que los personajes me gustaron, el grupo de investigación es agradable y cada uno desde su lugar muy capaz. Como personaje principal tenemos al inspector Marco Duarte, quien es el encargado de liderar la investigación de los asesinatos. En términos generales me pareció un buen policía, no solo porque se nota que es capaz y posee mucha inteligencia, sino porque sabe trabajar con los demás y lidera bien. Y para mi sorpresa es un hombre normal, sin grandes traumas. En el plano personal es fanático de rock, lo que demuestra en más de una ocasión, ya que la música está muy presente, y le gusta pasar tiempo con su hermano y su sobrino. Luego está Alejandra, también inspectora y compañera de Marco desde hace un par de años, otra policía aplicada y capaz con la que hace un buen equipo. El grupo se completa con Miriam, la encargada de prensa y psicóloga, JJ el experto en informática, y Jon y Salva, dos policías que suelen trabajar juntos y conforman un gran tándem. Por último, vale la pena mencionar a Itziar, la médica forense, que me gustó mucho también. Todos trabajan muy bien y crean un ambiente agradable, seguramente en el segundo libro el autor si profundice más en ellos, ya tengo ganas de reencontrarlos. Y no me olvido de la figura más importante del libro, que es el asesino, y del que además vamos a seguir algunos pasajes. Un personaje que está muy bien logrado, a través de sus escenas se puede apreciar que estamos ante alguien metódico y que disfruta matando por el tratamiento que le da a sus víctimas, pero que su imagen está como flotando porque al no tener demasiadas pistas en un principio y con todo lo del juego cuesta verlo como una persona.
En lo que refiere a la recta final y el momento de la revelación del asesino, es verdad que quizás se da de manera apresurada, pero el libro en sí es muy rápido, por lo que va en sintonía con eso. A mí dentro de todo me pareció un cierre logrado, la identidad del asesino no es tan obvia, si bien se llega a insinuar algo, el autor hace todo lo posible para preservar la intriga y juega un poco ahí hasta que tenemos un nombre. Y la acción está muy presente en esa instancia. Es un libro que tiene algunas sorpresas de gran impacto, especialmente una de ellas, no me la esperaba para nada, pero sin dudas eso hace la historia más fuerte de lo que ya es y realza lo aberrante del asesino. Sin contar con que el cierre nos plantea algo que deja un hilo abierto del que seguramente se tirará en la segunda entrega, lo que hace que uno se queda con la intriga. Realmente ha sido un gran descubrimiento, voy a ver si hago más caso a las recomendaciones de Instagram especialmente en cuanto a autores autopublicados porque este me ha animado. Disfruté demasiado esta lectura, y pronto leeré el segundo.
Mi valoración es:
Estaba hablando de Lovecraft con un amigo y de pronto poniéndome al día con tus reseñas me encuentro esta jajaja. Me ha parecido muy curioso el argumento y me alegra ver que ha terminado con tan buena puntuación ❤
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Una bonita casualidad jaja. Si, me ha encantado. ¡Muchísimas gracias por siempre leerme!
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